MANIFIESTO DEL ZULIA PARA EL PAÍS
Hoy 24 de julio con motivo del 237 aniversario del natalicio del Libertador Simón Bolívar y el 197 aniversario de la Batalla Naval del Lago

Quienes suscribimos, dirigentes estudiantiles, representantes sindicales y gremiales, líderes políticos, diputados, ex diputados, ex concejales, ex gobernadores, empresarios, amas de casa, luchadores sociales y comunitarios, miembros de las academias, intelectuales, autoridades universitarias y representantes de ONGs, le rendimos honores al Libertador Simón Bolívar a los 237 años de su natalicio y a los héroes de la Batalla Naval del Lago de Maracaibo, a los 197 años de la gesta que selló la independencia del País, a través de este manifiesto.

Venezuela atraviesa por una estructurada e inducida hecatombe política, económica, social y moral, nunca vista en su historia republicana. Las cúpulas que detentan el poder, han deshonrado la memoria de nuestro Libertador, dieron muerte a la Democracia, sepultaron la Constitución Nacional, el Estado de Derecho y las leyes; desaparecieron el salario de los trabajadores y las pensiones de los adultos mayores, al punto que con ese ingreso, no se cubre un día de alimentación; destruyeron el aparato productivo, nuestro signo monetario y saquearon las riquezas de la patria; por lo que hemos padecido en los últimos 4 años, de una Emergencia Humanitaria Compleja. Han pretendido doblegar a nuestro pueblo, negándole todos sus derechos, a través de la arbitrariedad, la perversidad, la represión y el terrorismo de Estado, y a pesar de que se siente secuestrado por parte de la tiranía mafiosa que usurpa el poder, no se rendirá. Razones por las cuales expresamos categóricamente lo siguiente:

1.- Rechazamos de la manera más enérgica todo el proceso inconstitucional y fraudulento que se ha gestado alrededor de la convocatoria a una nueva trampa organizada por la dictadura y para su beneficio, bajo el engaño de unas supuestas elecciones parlamentarias, para escoger sólo a quienes disfrutan de la destrucción del país. Esta nueva farsa, forma parte de todo el andamiaje que sustituyó la democracia por la tiranía; es la expresión de una hegemonía establecida desde hace varios años, donde todo lo que se decide es absolutamente írrito e ilegal. Ello incluye a todos los órganos adscritos y a los subordinados de mayor confianza de la usurpación, como lo son el TSJ y el CNE, en los que ha delegado la ejecución de cada uno de los fraudes y la clausura de los partidos políticos, impidiéndoles la renovación de sus directivas y eliminándole sus autoridades legítimas. Lamentablemente, a esta treta montada para el 6D, se han prestado unos tránsfugas y politiqueros, hoy convertidos en los principales y más útiles interlocutores y voceros de la tiranía.

El pueblo lo que quiere son elecciones presidenciales libres y universales, proceso que lleva 2 años de retraso, convencido de que sólo así, saldremos de la actual tragedia, que no es sólo la del COVID-19, sino la pandemia del hambre, la pobreza, el saqueo y la represión. Por lo que decidimos acompañar a todas las voces que han venido respaldando la propuesta del Presidente (E) Guaidó, de conformar, con perentoriedad, un Gobierno de Emergencia Nacional; que además de unir al país entero y dar respuesta a los graves problemas que sufrimos, organice en un tiempo prudencial unas elecciones libres, transparentes, equilibradas, competitivas y democráticas. Ese es el primer paso para restituir el hilo constitucional, deshilachado desde hace más de una década, pero que mostró su verdadero y nítido rostro ante el mundo, desde los años 2016 y 2017, al instaurarse la dictadura, a través de los golpes de Estado continuados.

2. Denunciamos ante el país, que nuestra región zuliana, que en otrora aprovechó sus riquezas humanas y materiales, en beneficio del desarrollo regional y que contribuyó con creces a la economía nacional, hoy se encuentra en estado de postración, arruinada y está entre las entidades más pobres y desiguales del país, con un incremento desmesurado de los índices de desnutrición infantil; acabaron con la educación, escuelas deterioradas, con incalculables cifras de deserción de docentes y alumnos; cantidades enormes de centros de salud técnicamente cerrados, hospitales en coma, los centros de atención a los ancianos en completo abandono, lo cual se ha puesto más de bulto durante la actual cuarentena; el monumental deterioro de la infraestructura y los servicios públicos, suprimieron la calidad de vida; la producción agrícola está en el mínimo, nuestras tierras productivas asediadas por grupos irregulares; total indefensión frente a las violaciones sistemáticas de los Derechos Humanos; la obligada diáspora, que en el Zulia es la más alta del país, envuelve: fuga de talentos, penurias inimaginables y el inmenso dolor y aflicción que genera la desintegración de la familia.

Conscientes estamos de que este desastre ocurre bajo el influjo de la dictadura destructiva, que recentralizó todo, que echó por tierra el principio constitucional, según el cual somos una República Democrática, Federal y Descentralizada, y que en confabulación con quienes detentan el poder regional y los poderes locales, revirtieron diametralmente las prioridades del Zulia y la condujeron a la peor crisis institucional. En la medida que fueron quebrando a PDVSA, le dieron rienda suelta a la opacidad económica y administrativa, donde son eficaces: blanqueo de capitales; ingresos ilegales por la extracción de materiales estratégicos, oro, piedras preciosas y otros minerales, a espaldas del presupuesto nacional; el narcotráfico, el lavado de dinero, el incremento del contrabando de extracción de mercancías y minerales y el cobro de vacuna; un altísimo grado de inseguridad para personas y bienes, la proliferación del crimen organizado y de la violencia, entre otros males.

Ante tanto abuso de poder y frente al cierre de las vías democráticas para la superación de esta tragedia, nos dispondremos a actuar conforme lo establecen los artículos 333 y 350 de la Carta Magna, levantando nuestro espíritu de rebeldía y lo mejor de cada uno de nosotros, en función de rescatar al Zulia y contribuir con el cambio del país. En la seguridad de que nos reencontraremos con nuestras fortalezas innatas, con nuestra demostrada capacidad para el emprendimiento y la creatividad, con esta región prodigiosa, cuna de la gaita y de los gaiteros, que cuenta con una fuente inagotable de bendiciones materiales, que para sí misma y para Venezuela, es una auténtica ventana al mundo.

3. En medio de la incertidumbre reinante, daremos prioridad a las tareas dirigidas a lograr la unión del país democrático, procurando en todo momento que los ciudadanos y el liderazgo regional y nacional, rememos en la misma dirección. Asimismo, se hace ineludible fortalecer las organizaciones sociales y políticas, reanimar el movimiento de protesta, articular y acompañar las luchas y reclamos del pueblo; activarnos contra la represión, la persecución y la violación de los DDHH, por la libertad de los presos políticos y el regreso de los exiliados.

Marco en el cual, le proponemos a la Asamblea Nacional, lo siguiente: 1. Que la AN tome las medidas pertinentes a objeto de culminar la escogencia de los rectores del CNE, tal como lo establece la CRBV; 2. Que la AN estudie la posibilidad de convocar y organizar una consulta popular, en el momento que considere apropiado y sin las limitaciones que impone la pandemia. Dicha consulta, tendría tres preguntas cuyo resultado será de obligatorio cumplimiento para la asamblea; a) ¿Está usted de acuerdo con la conformación, en el menor plazo posible, de un Gobierno de Unidad y Emergencia Nacional?; b) ¿Está usted de acuerdo en convocar elecciones presidenciales libres, justas y verificables?; c) ¿Está usted de acuerdo con prorrogar el funcionamiento de la actual AN legítima, hasta que existan la condiciones sanitarias, políticas y legales, para la celebración de sus elecciones?

Esta consulta, aparte de demostrarle al mundo que somos mayoría, permitiría consensuar democráticamente la ruta a seguir. Y, en combinación con el resto de las acciones, coadyuvaría a construir la fuerza que ha de ponerle fin a la tiranía.

4. Y a los miembros de la Fuerza Armada Nacional y de los cuerpos de seguridad, todos hijos de esta tierra, que no son ajenos al sufrimiento de los venezolanos, sea porque lo padecen en carne propia, o tienen familiares pasando penurias, o que forman parte de la diáspora; les decimos que darían una enorme contribución al país, asumiendo íntegramente la CRBV, especialmente su Artículo 333, que obliga a todo ciudadano envestido o no de autoridad, a su restablecimiento, cuando la misma por acto de fuerza ha sido menoscabada. Entendemos la complejidad que ello encierra, toda vez que entre sus filas y sobre todo en los altos mandos, hay quienes se han desviado de la institucionalidad, se han corrompido y están incursos en delitos y crímenes; a lo que se agrega que la tiranía ha infiltrado a sus componentes con personal de la contrainteligencia cubana y rusa, que se han puesto a su servicio a cambio del saqueo al país. A este régimen nunca le ha importado entregar la soberanía, con tal de que ello sirva para eternizarse en el poder. Pero ha de llegar el día en que se concite la desobediencia a los mandos, cuando estos recurran al expediente de la represión, la violación de los Derechos Humanos, al crimen, la tortura y al asesinato, contra el pueblo que se rebela frente a la barbarie y demanda libertad. Sería un gran paso que serviría para frenar los desmanes de la tiranía y para evitar que los indignos terminen de arrasar con lo que queda de nuestra Nación.

A los 24 días del mes de julio de 2020, suscribimos,

Atentamente, bloque zulianos Amenhotep Planas Raga