Ecuador, un país rico en biodiversidad

Estudios determinan que la flora ecuatoriana llega a 20 mil especies de plantas vasculares que corresponden al 1,6% de las especies existentes en todo el planeta, y en fauna se han registrado más de 2 mil 500 especies de vertebrados terrestres que representan el 11,5% del total mundial, de los cuales, el 11,5% son especies endémicas, es decir, únicas en el mundo.

La diversidad biológica no sólo es importante por su valor natural como parte de los sistemas que sustentan la vida, sino que representan un potencial económico muy grande, y que aún no ha siso valorado en la planificación nacional.

Los peces

En el Ecuador los peces son el grupo de vertebrados más diverso después de las aves, pues se han registrado cerca de 1.340 especies. Entre los peces dulceacuícolas, solo en la década de 1990 se registraron más de 100 especies nuevas y hasta 2001 se calcula que hay por lo menos 820, muchas de las cuales son endémicas del Ecuador.

La mayor diversidad está en la Amazonia, seguida por la Costa. Solo en la cuenca del río Napo, a comienzos de la década de 1980 se detectaron más de 470 especies, número que supera el encontrado en cualquier otra cuenca hidrográfica del mundo.

Entre estos peces amazónicos destacan las dientudas pirañas y el gigante paiche
En la Sierra hay pocas especies, destaca la preñadilla, que era muy común en los ríos de los valles interandinos pero que prácticamente ha desaparecido debido a problemas ambientales como la destrucción y fragmentación de sus hábitats, la contaminación del agua y la introducción de especies como las voraces truchas. Estos problemas también afectan a las especies de la Costa y la Amazonia.

En cuanto a la diversidad de peces marinos, hasta el 2000 se habían reportado 479 especies en el territorio continental, a las cuales se suman 41 endémicas de Galápagos y que da un total de 520 especies.

Amenazas

En la Costa las principales amenazas son la expansión de las zonas agrícolas a expensas de los bosques, las actividades forestales industriales e informales, los crecientes monocultivos, la tecnificación de la agricultura, la expansión de las camaroneras, entre otras, que han contribuido a que muchas especies silvestres desaparezcan.

En la región Sierra las amenazas son: la creciente actividad agrícola y su tecnificación, la tala indiscriminada de los bosques, y el aumento considerable de la actividad ganadera, con lo que, en provincias como Tungurahua, Chimborazo y Cañar se han perdido entre el 12 y el 40% de la diversidad genética existente.

En el Oriente la amenaza procede principalmente de la explotación petrolera, la ampliación de la red vial, la colonización desorganizada, la expansión de áreas agrícolas y ganaderas y la extracción maderera. Otros aspectos que también afectan la biodiversidad, en especial de la fauna es la caza furtiva, el comercio ilegal de especies, el uso de artes de pesca inadecuados, y el uso inadecuado y sin planificación de los recursos naturales renovables.

Áreas protegidas

El área protegida es un espacio terrestre y/o marino especialmente dedicado a la protección y el mantenimiento de la diversidad biológica, de los recursos naturales, y de la diversidad cultural asociada a éstos. Son sumamente importantes para el desarrollo de cualquier nación, pues proveen agua, regulan el clima, controlan la erosión, son atractivos turísticos, albergan especies y variedades de importancia económica, en otros beneficios.

El Ecuador cuenta con el Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP), encargada de conservar y manejar la diversidad biológica del país, y en la cual hasta mediados de 2001, existían 27 áreas protegidas en el Ecuador que la conforman: 24 continentales, una marina (Reserva marina de Galápagos); y dos insulares (Refugio de Vida Silvestre Isla Santa Clara y el Parque Nacional Galápagos).

.Las áreas protegidas son:

Reserva ecológica Antisana
Reserva geobotánica Pululahua
Parque Nacional Yasuní
Parque Nacional El Cajas
Parque Nacional Cotopaxi, entre otras