El egoismo es el veneno que empaña el alma y que impulsa al ser humano a cometer hechos que dañan y destruyen a los demàs, sin sentir ningún tipo de remordimiento ni respeto hacia el otro.

El egoismo solo persigue sastifacer una necesidad individual y perversa cueste lo que cueste, usando los medios que sean necesarios, para alcanzar sus nefastos objetivos. Así de terrible es el egoismo, ausente de sensibilidad, carente de amor, acèfalo de respeto, es violento, no edifica, es enemigo de la bondad, corrupto, àvaro y codicioso.

Una persona egoista solo se interesa por sí misma y nada màs, no es considerada ni solidaria. Lo que pueda arrebatarle a otros, lo hace sin consideración. Asfixia y aplasta sin compasión alguna. El egoismo solo ve sus intereses y nunca agradece, màs bien abusa de las buenas intenciones y se aprovecha negativamente. El egoismo divide y destruye no le interesa la paz, solo poder para destruir.
Uno de los peores males del mundo es el egoismo, fàcil de derrotar con dosis de amor, bondad y comprensión. Una persona egoista es pobre de espíritu y amor.

fuente Abog. Nilmary Boscán Maldonado.